El grupo de Sugimoto va hasta la cabaña donde yacía Edogai y encuentran a varios hombres disecados a los que le faltaban la piel y que probablemente fueron usados para realizar las falsificaciones de la pielde los prisioneros tatuados.
Por otra parte, el Sargento Tsukishima logra escapar, llevando asi las pieles falsificadas al Teniente Tsurumi y el último mensaje de Edogai que fue: "Hierro". Tsurumi manda a al Sargento a descansar y trata de desifrarel mensaje de Edogai, hasta que recuerda una advertencia sobre el guante de piel que había encontrado en el cementerio, que si la mojaba la piel reaccionaría, con esto Tsurumi tiene una manera de identificar las pieles falsas.